El Ayuntamiento de Bujalance a través de la concejalía de Calidad y Protección Ambiental ha puesto en marcha un nuevo proyecto medioambiental de reforestaciones participativas en zonas degradadas del municipio.
La vegetación juega un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático. Las plantas y árboles, además de actuar como reguladores térmicos generando humedad en el ambiente y contribuyendo a la formación de precipitaciones, son sumideros de carbono que ayudan a reducir la concentración de CO2 en la atmósfera.
La restauración ambiental es el proceso consistente en reducir, mitigar e, incluso, revertir los daños producidos en los ecosistemas.
Entre los objetivos de las arboladas participativas son:
-Repoblar zonas degradadas con árboles.
-Reducir la Huella de Carbono del municipio.
-Aumentar los sumideros de carbono que contribuyan a disminuir el efecto invernadero.
-Aumentar la biodiversidad.
Desde la concejalía de Calidad y Protección Ambiental pretende concienciar a la población sobre los efectos del cambio climático.
-Informar a la población de la riqueza natural del municipio así como otros aspectos relacionados con el cambio climático y biodiversidad.
Las acciones de reforestación planteadas permitirán la restauración ambiental de determinadas zonas del municipio, con el fin de reducir, mitigar e, incluso, revertir los daños producidos en los ecosistemas. Las áreas degradadas son zonas muy expuestas a la erosión fruto, sobre todo, de la escorrentía superficial.
La tierra desnuda y desprovista de protección es fácilmente erosionable, permitiendo la desaparición del suelo y posibilitando el avance de la desertificación.
A través de la participación de la ciudadanía, escolares, familias, voluntarios, se llevarán a cabo las plantaciones con especies autóctonas del ecosistema que contribuirán a su mejora.